Copio y pego la noticia:
Enlace a la noticia publicada en La Nueva España:
Hoy al leer la prensa digital de Asturias he vuelto a encontrar un titular alarmista seguido de un artículo en el que se antepone la voz de esa minoría extremista que proporciona la noticia dantesca, reflejando en segunda plano los hechos y la opiniones más moderadas, para crear con ello una noticia en la línea habitual de la campaña orquestada en esta comunidad en contra del lobo. Incluso de las teorías del tipo "agujero de gusano" del señor de Ponga (impulsor de una plataforma de afectados), que da a entender que debido a la persecución que los lobos ejercen sobre los jabalíes de este concejo éstos se desplazan hasta Siero.
Se quiere culpar entre otras cosas al lobo del éxodo rural, de la incompetencia de la administración en la gestión de los recursos naturales y las infraestructuras o de la insolvencia de algunas sociedades de cazadores.
Cuando los escasos hechos que se exponen, y que muy probablemente en mi opinión están reflejando un pico en el aumento de la presencia y densidad de ungulados en estos momentos debido a lo duro que está siendo este invierno en la región, con la caída de la cota de nieve, que ha empujando ocasionalmente a algunos de estos animales a descender en busca de alimento.
El paisaje de la montaña asturiana ha estado cubierto este invierno bajo una importante capa de nieve.
Grupo de jabalíes ascendiendo una ladera nevada.
Para mi esto es una muestra más de que la persecución a la que se está sometiendo al lobo en Asturias y que con la disminución de sus efectivos se está provocando un desequilibrio en la pirámide ecológica, el cual hará aumentar el número de ungulados pudiendo provocar éstos un aumento de daños a la agricultura entre otros.
Venados desplazándose trabajosamente a través de la nieve.