Este mes hemos pasado de tener las montañas de Asturias cubiertas de nieve a partir de los 1200 mts. a quedar pequeños neveros relegados a las cumbres o cantones menos soleados. Y al estar arriba y abajo intentando captar a mis bóvidos preferidos pasar de pisar hielo y nieve al sustrato helado del suelo de los pastizales subalpinos, helado a primeras horas de la mañana y resbaladizo una vez ha sido calentado por el sol.
Os deseo una buena entrada de año.
Lo mismo te deseo Jorge, Feliz Año. Precioses les fotos de los rebecos en, para mí, su mejor época por su pelaje. Un abrazu.
ResponderEliminarFeliz Año Jorge.
ResponderEliminarUnas grandes tomas que reflejan a la perfección el habitat y ambiente por donde se mueven los rebecos. Un saludo
Hola Jorge.
ResponderEliminarEl otro día en Somiedo vi muchos, muchos rebecos. En el blog colgué una foto mala creo que hasta desenfocada, pero en cualquier caso sirve para ver que no tenían ni de lejos el estupendo color oscuro invernal que aparece en tus fotos. Los de Somiedo parecían descoloridos. Algunos hasta tenían la máscara blanquecina.
Un saludo, estupenda entrada y feliz año.